Pasta de anacardos, 200 g

Una pasta de frutos secos perfecta para el desayuno, la comida o la cena

Me encantan los sabores naturales, sin los cuales ya no me imagino haciendo mi vida diaria. La pasta de anacardos es un producto único, versátil y delicioso tanto para los más pequeños como para los más grandes. Sobre todo porque tiene una textura aterciopelada que se deshace en la boca. Mi pasta es 100% de anacardos, sin aditivos, sustancias artificiales, azúcar ni conservantes.

Las pastas de cacahuetes no tienen por qué estar compuestas sólo de cacahuetes, aunque éstas son las más populares y llevan años en los estantes. Me alegro de que busque otras variantes, porque realmente merece la pena, y en muchos sentidos. En primer lugar, por el sabor.

Los anacardos son uno de los frutos secos con menos calorías, que además ayudan a reducir el apetito y mejoran el estado de ánimo. Las personas a dieta pueden comerlos sin reproches. Favorecen la absorción de azúcares y el trabajo del sistema cardiovascular.

Pero atención:

¡esta crema de cacahuete está tan buena que es difícil no comérsela con cuchara directamente del tarro! Reconozco que yo misma lo hago muy a menudo.

Guarde la pasta en un lugar seco y fresco y utilícela en el plazo de 1 mes desde su apertura. El aceite se separa de la pasta de forma natural, sólo hay que remover el contenido del tarro antes de consumirlo para igualar la consistencia y disfrutar de todo el sabor.